viernes, 6 de enero de 2012

Creando mi hogar

Me late chocolate. Tomo chocolate en casa.
Aunque anoche regresé a casa, es como si no fuera la mía. A mi retorno alguien había colonizado estas tierras y se niega a negociar, con un pacifico acuerdo, los espacios . Y aunque la guerra no es lo que quiero en la vida, si algo he traído del Mar es su fuerza. Fuerza que me permite defenderme, mi espacio, lo que soy, mis fronteras y cordilleras, mis aguas subterráneas, mi fauna y flora.  

Todo parece indicar que hoy tendrá que emerger de mi la guerrera. Así es que me espera un día de mucho trabajo. Pienso reorganizar, pintar y limpiar a toda costa. Redefinir espacios. Esta también es mi casa. Y vengo a reclamar lo que me corresponde. Mi lugar en el mundo. No pienso ceder un milímetro. Estoy cansada de agachar la cabeza, de posponer o renunciar a lo que soy porque a "otros" no les parece o no están de acuerdo.  

Aunque puedo ser absolutamente amorosa, también puedo ser una completa hija de puta. Y si eso hace falta lo seré. Con el coraje de Mar en mi corazón empiezo un día de transformaciones. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario